En teoría

Ah, si todo fuera como en la teoría creo que este mundo sería diferente, al mero estilo de los cuentos de hadas y las fábulas, pero todo en teoría es una cosa y en la práctica comprobamos que nada tiene que ver lo que está escrito o como deberían ser las cosas con la práctica real del día a día, nada.

Algo así como la estúpida rivalidad de las expectativas versus la realidad, nunca y por más que lo intentes, NUNCA, tus expectativas se acercan ni siquiera tantito a la realidad, así mero pasa con la teoría y la práctica, entre más deseas que las cosas sean de la forma en la que las imaginas, las deseas o las necesitas es indirectamente proporcional la realidad. Oh, como me acuerdo cada que pienso en esto de las expectativas y realidad con la película, 500 días con ella, siempre, hay un punto en el que retorno a esa película, como si fuera un imán para intentar comprender la vida y por supuesto el amor.

Pero el día de hoy no estoy hablando del eterno dilema de la realidad versus las expectativas, hoy hablamos de la teoría versus la práctica y el montón de veces que he escuchado eso de la relatividad de las teorías de la vida:

En teoría

• “salgo temprano del trabajo”
• “somos algo más que amigos”
• “no nos dejan tanta tarea”
• “no lo quiero tanto”
• “no trabajo los sábados”

Dos palabras que anteponemos a situaciones que están fuera de nuestro control y que si podemos controlar, pero en la práctica están fuera de nuestro poder y no nos queda más que aceptar el estado universal de las cosas que hacemos, las situaciones que enfrentamos o las relaciones que tenemos.

En teoría todos deberíamos ser felices, tenemos como, inteligencia, recursos, capacidad, ojos, piernas, en teoría la mayoría tiene todo lo necesario para ser feliz y pleno, pero en la práctica son muy pocas las personas que lo logran. En la práctica las cosas son tan diferentes que me hace preguntarme, si vivimos en función de la práctica porque seguimos recordando la teoría, porque seguimos apegándonos a la idea, porque seguimos ilusionándonos o esperanzándonos en las expectativas, si ellas nunca suceden; si la teoría nunca es una realidad, porque seguimos hablando de ellas, porque seguimos aferrándonos a la teoría si ya sabemos que en la vida la teoría solo está plasmada en letras, las expectativas solo viven en nuestra cabeza, porque seguimos pensando en eso de la teoría.

Tal vez sea una forma de decirle al mundo está bien lo acepto, además sino fuera por la teoría y las expectativas para esperanzarnos, esto de vivir sería un bodrio apestoso, algún día la realidad supera a las expectativas, eso dice la teoría.